¡Hola!

 

Me llamo Noemi y soy artesana. Diseño, creo y pinto. Después de un intento fallido de empresa lo dejé todo y me vine por amor a un pueblito perdido. Me monté un taller clandestino en el cuarto de invitados dónde paso las horas diseñando y pintando muchas parejitas de enamorados.

Alicantina afincada en tierras valencianas, me he criado entre olivos y almendros y me encanta el campo pero sobre todo la manzanilla. Y como la “terreta” tira, nació Miss Camomila, cada uno de mis pedidos llegan a sus nuevos hogares con un ramillete de camomila, recogida por mí de mi campo y con amor. Incluso te puedes hacer una infusión. (También tenemos aceite de oliva del bueno, pero eso es otro tema)

Mi pasión por lo hecho a mano viene de mi casa, de ver a mi madre, coser, tejer, bordar, etc..  Siempre he disfrutado de las pequeñas cosas con ella, así que volver a coger un pincel me recuerda a aquellas tardes de invierno pintando en la mesa de la cocina las figuritas del belén que cada año era más grande.

Disfruto con aquello que me trae buenos recuerdos, así que me encanta  la sensación de crear algo para ti y que sé que formará parte de un día especial en tu vida. Le llamo MAGIA.

Todos los productos en Miss Camomila están hechos a mano, intento que sean los mejores materiales para trabajarlos con mucho mimo y detalle. Aquí cada producto es único y tiene magia.